Lecturas para el alma, la meditación y la risa

Lecturas para el alma, la meditación y la risa
Por: José Francisco Martínez Ortiz

lunes, 28 de noviembre de 2022

Versionando una leyenda.



 Punto de Vista. Reconocer no es Conformarse. El tema de hoy. Versionando una leyenda.

 - Hace algunos años, en la juventud, compartiendo entre amigos, conocí una leyenda en la que se muestra a través de una historia la honestidad como base en la moral de las personas. Hoy la comparto. - Aconteció en la China antigua. Un príncipe en víspera de ser coronado emperador y la ley exigía estar casado. Decidió hacer una competencia entre las doncellas de la corte y fueran dignas de su propuesta. Hace la convocatoria a las pretendientes y lanza el desafío. Una señora sierva de palacio por muchos años, conoce del asunto y sintió tristeza porque sabía que su joven hija guardaba un profundo sentido de amor por el príncipe. Le hace saber a la joven lo que ocurre en el palacio y se asombra por la intención de la muchacha de estar donde las más bellas y ricas de la corte. Yo se que sufres, pero no lo conviertas en locura. —No querida madre, no estoy sufriendo, ni loca, sé muy bien que ni seré escogida pero es la oportunidad de estar al menos un rato cerca del príncipe, voy y eso me hace feliz. En palacio el príncipe anuncia el desafío: les daré una semilla y la dama que dentro de seis meses me traiga la más bella flor, será escogida como esposa y emperatriz de China. 


La tradición en la población era cultivar algo. Pasó el tiempo y la dulce joven no tenia habilidades para el cultivo de jardín y cuidaba con esmero la semilla porque sabía que si la belleza de la flor fuera como su amor no tendría que preocuparse. Pasados tres meses, usando varios métodos pero nada había nacido. Seis meses y nada brotado y el sueño más alejado. Convencida de su esfuerzo y dedicación le informa a la madre que independientemente de todo iría al palacio el día y hora acordado. A la hora fijada todas las pretendientes, solo que la vasija estaba vacía y las demás con las más bellas flores nunca imaginadas. Colores y figuras no vistas. La muchacha admirada ante la escena. Llegado el momento de la selección el príncipe revisa cada ejemplar con mucho cuidado. Después de pasar por todas anuncia el resultado. Indicó que la joven hija de la sierva de palacio sería su futura esposa. Las reacciones fueron diversas, nadie entendía la decisión, escogió la que nada había cultivado. Entonces en príncipe aclaró: ”Esta fue la única que cultivó la flor que es digna de ser convertida en mi emperatriz: la flor de la honestidad, porque todas las semillas que les ofrecí eran estériles “. De esta historia podemos inferir varias enseñanzas.

— Qué precio estás dispuesto a pagar por vencer?. Si para vencer puedes poner en riesgo tu honestidad... de ser así es mejor que pierdas... y así serás vencedor (a).

No le quepa la menor duda. Si no coincide con el Punto de Vista, la razón es suya. Puede opinar.

Últimos articulos

Puedes intentar escribir.